Voy a sudar la camiseta y a empolvarme los zapatos: Luis Lauro Reyes Rodríguez

60

Fue la tarde del sábado. El primer ayuntamiento morenista se instaló en esta localidad bajo los mejores augurios. Del anterior cabildo ni sus luces, ni por la feria regresaron.

Pero no hicieron falta. Una nutrida representación interejidal arropó al alcalde Luis Lauro Reyes Rodríguez, mejor conocido como “Erick”, sin faltar una presencia multicolor partidista.

Vinieron a darle “calorcito” al evento, el futuro delegado federal del presidente Andrés Manuel López Obrador en Tamaulipas, José Ramón Gómez Leal, y el senador por Morena, Américo Villarreal Anaya, vecino por cierto de esta cabecera como lo fue su padre del mismo nombre.

“Las campañas nos dividieron pero no nos separaron”, estableció ante el micrófono el nuevo alcalde. Y en efecto, asistieron representaciones de varios colores que tienen interés en Güémez.

Allí está el diputado federal Mario Ramos Tamez, del V distrito, proveniente del Movimiento Ciudadano y apoyado por la coalición que formaron con el PAN y PRD.

No faltaron la derrotada candidata del PRI, Alejandra Cárdenas Castillejos, que compitió precisamente contra Ramos Tamez, y Eduardo Gattas Báez, perdedor por la presidencia de Victoria por Morena.

Se dejó venir Salomón Rodríguez Gómez, ex candidato del PRI que no pudo llegar a la presidencia del vecino Padilla.

Luis Lauro fijó su posición desde el micrófono:

-A quienes fueron dignos adversarios en campaña, siempre mi mano extendida para ellos, siempre mis oídos atentos para sostener un diálogo de respeto y tolerancia.

La representación del gobernador del Estado la trae Humberto Zurita Eraña, subsecretario de Educación, ante quien rinde protesta el nuevo presidente, y éste a su vez lo hace con los miembros de su cabildo.

Los panistas, bajo el mando del alcalde Carlos Cárdenas González, ya se fueron. Su madre, Adela Cárdenas Bujanos, perdió la elección frente al partido de López Obrador.

Cárdenas ganó en 2016 con una diferencia de dos votos; Erik refrendó victoria con 370.

Junto con el panismo, de la noche a la mañana desaparecerán los colores azules de vehículos y del equipamiento urbano de este municipio.

“Güémez me encanta”, es el lema de la administración de Luis Lauro, enmarcado con el rojo marrón del morenismo.

Conoce el municipio, es originario del ejido Guadalupe Victoria, profesor rural, ex jefe del programa Oportunidades en el ayuntamiento.

En un centro cívico a reventar, las porras de sus simpatizantes no dejan de repetir el ¡sí se pudo!, en una elección que tenían cuesta arriba.

Acompañan al alcalde su esposa Valeria y sus hijas Valeria y Camila.

A TRABAJAR, SE ACABO LA FIESTA Y EL CARNAVAL

En su primer discurso como presidente, luego de rendir la protesta, Erick (como le dicen todos), recuerda las palabras que le dijo su madre por la mañana: “Sin Dios nada soy”.

Católico creyente, abunda: “A Dios le he prometido trabajo para la gente más necesitada”.

En seguida anuncia el “nombramiento” de su primer colaborador, Rubén Alejandro Silvestre Ruiz, apodado El Güero, oriundo de Padilla, en calidad de asesor.

-Él empezó y terminó conmigo. Hasta el cielo te pido que no nos dejes. Te estaremos constantemente pidiendo consejo.

Muy joven, falleció recientemente.

Hizo suyos los principios del presidente Electo de México Andrés Manuel López Obrador.

-No les voy a mentir, no los voy a robar ni a traicionar, vamos a iluminar a Güémez, vamos a poner el ejemplo.

Dijo que “la fiesta y el carnaval han terminado” y llegó el momento de trabajar porque el municipio no puede esperar, se van a pavimentar las calles y a mejorar los servicios públicos.

Prometió que “aquel servidor que no cumpla se va ir; no vamos a ser un gobierno más, vamos a ser el mejor gobierno”.

Finalizó: “Voy a sudar la camiseta y a empolvarme los zapatos”.

Dejar una respuesta