Japón se ha quedado sin espacio en sus plantas nucleares para almacenar el agua radiactiva; por lo que planea arrojar más de un millón de metros cúbicos de agua contaminada al Océano Pacífico.
Hace 10 años un terremoto en Japón destruyó la planta nuclear de Fukushima Dai-Ichi, dejando sin espacio de almacenamiento de agua radiactiva a Japón. Debido a esta afectación, el país asiático ha implementado medidas para deshacerse de ese líquido; aun cuando vecinos y autoridades ambientales se han opuesto a la propuesta.
Este martes el gobierno de Japón anunció que se liberarán más de un millón de metros cúbicos de agua radiactiva tratada de la planta nuclear de Fukushima Dai-Ichi al Océano Pacífico. No obstante, señaló que la liberación será hasta en dos años.
Mientras tanto, Tokio Electric Power se preparará para el proceso. El agua se diluirá antes de su liberación y posteriormente, el gobierno fortalecerá los esfuerzos para monitorear la radiactividad; según un informe del Ministro de Economía, Comercio e Industria (METI)
Durante estos 10 años posteriores al terremoto que afecto a la planta nuclear, surgió un debate sobre qué se debería hacer con el agua radiactiva; misma que es tanta como para llenar más de 500 piscinas olímpicas con el líquido.
Yoshihide Suga, primer ministro de Japón, señaló que la eliminación del agua contaminada es el primer paso frente a un desmantelamiento completo de la planta de energía nuclear.