En 2015 nos enteramos de que Apple estaba trabajando en su propio automóvil eléctrico (o por lo menos en algún tipo de tecnología de conducción autónoma) bajo el nombre de Project Titan, pero en 2017 y 2019 la compañía despidió a cientos de empleados de esta división secreta, por lo que dimos el proyecto por cancelado. Ahora dicen que Apple quiere tener su propio coche autónomo en producción para 2024, y que está trabajando en una nueva tecnología avanzada de baterías para diferenciarlo de su competencia.
Si bien Apple no se ha pronunciado al respecto, fuentes anónimas dijeron a Reuters que la compañía ha estado avanzando en el desarrollo de su propia tecnología de automóviles autónomos y que apunta a 2024 para la producción de un vehículo de pasajeros que podría incluir su propia tecnología de baterías, aunque la pandemia podría haber retrasado esta fecha límite a 2025.
No está claro quién ensamblaría un coche de marca Apple, pero las fuentes de Reuters dicen que aún existe la posibilidad de que Apple reduzca sus esfuerzos a un sistema de conducción autónoma que se integre en un automóvil fabricado por una marca de coches tradicional, un rumor recurrente sobre Project Titan.
En cuanto a la nueva tecnología de baterías, se dice que Apple planea usar un “diseño único de monoceldas que aumenta el volumen de las celdas individuales y libera espacio dentro del paquete de baterías”, de manera que se pueda empaquetar más material activo dentro de la batería, lo que potencialmente significa una mayor autonomía para el vehículo. Apple también estaría examinando una química de baterías llamada LFP, o fosfato de hierro y litio, que es menos propensa a sobrecalentarse y más segura que otros materiales.
“Es el siguiente nivel”, dijo a Reuters una persona familiarizada con el proyecto. “Como la primera vez que viste el iPhone”. Claro que Apple va a tener compañía en este viaje. Tesla, una de las empresas más avanzadas en tecnología de baterías para coches, anunció en el Battery Day de septiembre sus celdas 4860 con un nuevo diseño sin pestaña (la pieza que une la celda a lo que está alimentando) cinco veces más potentes y seis veces más densas en energía que las actuales, lo que se traduce en un 16% más de autonomía para sus coches.